La historia se repite dos veces

Un año atrás Boca le ganaba a River 2 a 0 con dos goles inolvidables del chileno Gary Medel. Aquel superclásico que se  suspendió por lluvia y se  volvió a jugar en la misma semana se repetía con el mismo resultado pero no con el mismo escenario. Una bombonera soleada, llena, con ocho mil personas de más, presentaba una decoración muy particular: en cada tribuna xeneise había gran cantidad de “fantasmitas de la b”  y muchas banderas con la leyenda: “PROMOCIÓN 2011”, "BOCA UNIDOS UN CLÁSICO DE TU CATEGORÍA"

Ambos equipos llegaban mal a este gran encuentro. Boca un poco mas aliviado por una seguidilla de victorias que consiguió previos al clásico mientras que River no venía acumulando puntos y tenía la presión de ganar para no caer en la zona de promoción y depender de Olimpo de Bahía Blanca.

Boca no llegó a desempeñar un alto nivel en el campo de juego más allá del autogol de Carrizo y el formidable cabezazo de Martín Palermo; se pudo ver un Mouche sin precisión a la hora de definir o de dar un pase gol y un equipo con poca interacción.

River Plate empezó dominando el partido los primeros minutos generando situaciones y penales no cobrados (seis según Pasarella) en gran parte por el juego de lo mejorcito que tiene el millonario: Erick Lamela.

Como todo superclásico llega un punto en el que entra en ebullición. Y así pasó en los últimos minutos del partido con la trifulca generada por una discusión verbal entre Clemente Rodríguez y Matías Almeyda que originó la expulsión de ambos y la escandalosa salida del “pelado”, ídolo de River, besándose la camiseta enfrente de la 12 y a los empujones con la policía que lo protegía.

Como hacía referencia al principio de esta nota, el conjunto dirigido por Falcioni volvía a ganar en su casa extendiendo la paternidad sobre River y todo le salió “a pedir de boca” quedando a tan solo seis puntos del puntero Velez Sarsfield,  logrando también que Martín Palermo,  su máximo ídolo que jugaba su último clásico marque ese tan emocionante cabezazo y como frutilla del postre puso al millonario en una situación aún más comprometida de la que estaba, obligándolo a ganar lo que queda del campeonato para no ser parte de la promoción 2011.

Imagen: http://www.pueblum.com/news/actualidad/deportes/2011/05/16/la-alegria-es-solo-de-boca/